COMPRENDE uno, cómo no va a comprenderla, la preocupación que suscita en nosotros el futuro de la cultura en España.
Hace unos días apareció en la primera página de un periódico nacional esta fotografía en la que tal preocupación parecía quedar escenificada: actores de teatro, de cine, directores de cine, de teatro, una cantante pop, un torero y una galerista de arte, personajes más o menos célebres del Gran Teatro del Mundo. Desde hace años, demasiados ya, cada vez que se plantean reivindicaciones para el mundo de la cultura o protestas por tal o cual atropello contra él, se suele recurrir a quienes representan no sabemos si el de la cultura, pero sí, sin la menor duda, el del espectáculo. Y de ese modo acabamos preguntándonos por qué razón se expulsa sistemáticamente de tales escenificaciones, cosa harto sospechosa, a filósof*s, poetas, bibliotecari*s, pintor*s, escultor*s, artesan*s, profesor*s de insitituto y de universidad, pequeñ*s y median*s editor*s, investigador*s, intérpretes de música clásica y tant*s otr*s sobre quienes descansa, y a veces de modo decisivo, eso que damos en llamar la cultura más que en ningunos otros figurantes; por qué cuando se necesita un voluntario para representar a la cultura suelen postularse los mismos, personajes que acaso se acomodasen mejor tras de una cartela o pancarta en la que leyéramos #porelespectáculo, y que en vista de lo poco o nada conseguido por los tales hasta hoy, quizá fuese hora de llamar en auxilio de la cultura a filósof*s, poetas, profesor*s y demás modesta, seria y esforzada tropa, y mandar a aquellas relumbrancias a un bien merecido retiro o penumbra.
Hace unos días apareció en la primera página de un periódico nacional esta fotografía en la que tal preocupación parecía quedar escenificada: actores de teatro, de cine, directores de cine, de teatro, una cantante pop, un torero y una galerista de arte, personajes más o menos célebres del Gran Teatro del Mundo. Desde hace años, demasiados ya, cada vez que se plantean reivindicaciones para el mundo de la cultura o protestas por tal o cual atropello contra él, se suele recurrir a quienes representan no sabemos si el de la cultura, pero sí, sin la menor duda, el del espectáculo. Y de ese modo acabamos preguntándonos por qué razón se expulsa sistemáticamente de tales escenificaciones, cosa harto sospechosa, a filósof*s, poetas, bibliotecari*s, pintor*s, escultor*s, artesan*s, profesor*s de insitituto y de universidad, pequeñ*s y median*s editor*s, investigador*s, intérpretes de música clásica y tant*s otr*s sobre quienes descansa, y a veces de modo decisivo, eso que damos en llamar la cultura más que en ningunos otros figurantes; por qué cuando se necesita un voluntario para representar a la cultura suelen postularse los mismos, personajes que acaso se acomodasen mejor tras de una cartela o pancarta en la que leyéramos #porelespectáculo, y que en vista de lo poco o nada conseguido por los tales hasta hoy, quizá fuese hora de llamar en auxilio de la cultura a filósof*s, poetas, profesor*s y demás modesta, seria y esforzada tropa, y mandar a aquellas relumbrancias a un bien merecido retiro o penumbra.
Qué foto madre mía
RépondreSupprimerfilósof*s .Lo que no se puede leer no se debe escribir. Me gustaría, señor Trapiello,verlo leer este texto de hoy, a ver cómo se las ingeniaba cuando llegase a ese asterisco.
RépondreSupprimerEl inquisidor de los asteriscos.
Los ojos también leen sin pronunciar palabra. Y van más lejos que la gramática y el sexo. Como la vida.
SupprimerTouché, señor Trapiello. Pero déjeme precisar: cómo leer en voz alta esos asterisos. Aunque sí, me dirá que la única lectura verdadera que podemos hacer es la que nos habla en silencio. En fin, tendrá siempre usted las de ganar porque alguien que escribe como usted nos tiene ya previamente ganados.
SupprimerEl inquisidor
A estos representantes de la cultura de Brazatortas le deberían de ir dando un poco por saco, pues ua está bien de que asomen siempre el careto en cuanto ellos entienden que les tocan un poco el bolsillo. Ni un euro en subvenciones para esta gente ni nada de nada. Que trabajen y vendan, como todo el mundo en la sociedad capitalista, y si no que se dediquen a otra cosa. ¡Venga!
RépondreSupprimerMe sumo totalmente.
RépondreSupprimerDigo la tara, y no me entiende nadie; digo la tara y la rejama, y ya me entienden muchos; digo por fin la tara y la rejama, el tomero y el romillo y veo que me entienden todos. El injusto poder de convicción de los sistemas viene del hecho –por lo demás, epistemológicamente necesario- de que el cerebro humano sea tan inercialmente, tan formalísticamente, analógico y combinatorio.
RépondreSupprimer(Rafael Sánchez Ferlosio, Vendrán más años malos y nos harán más ciegos, 1993)
Yo aún diría más... Pero Montano lo ha sabido expresar muy bien, así que me remito directamente a él:
RépondreSupprimerhttp://www.jotdown.es/2012/07/jose-antonio-montano-maestros-del-rococo/
Ay, A., cómo afean y ensucian esos asteriscos cualquier párrafo, no sucumbas al meapilismo «de género»... (de Alf)
RépondreSupprimerHola, Alfonso. Pero es que además a mí me parece tipográficamente bonito (en cuanto se punzara un * en forma adecuada, conservando la caja y demás, no como ahora que sale descolgado por defecto). En la lectura el * no ofrece ningún problema –ninguno de nosotros leemos moviendo los labios–, y si el texto ha de leerse en voz alta, bastaría cualquier otra cosa, por ejemplo, el gesto que hacemos todos leyendo en alto al llegar a unas comillas: levantamos los dedos índice y corazón y rayamos con ellos el aire: todos advertimos entonces que lo que sigue es una cita literal. Salud, camarada compañero.
SupprimerMe ha encantado la colleja al espectáculo, se puede decir más alto pero no más claro, el main stream cultural de este país es mero cartón piedra. Ahora bien, bonitos o no, reconoce que los * distraer, distraen. Por eso, entiendo, que cuantos menos, mejor...(el arquitecto)
SupprimerYo también me sumo. Y añado: ¿la foto está retocada o estaba pensada para ser utilizada en una viñeta de Forges?
RépondreSupprimerEn esta foto me faltan Bardem, Bibi Andersen y Miguel Ríos. Si estuviera hecha en 1937 los oportunistas hubieran sido Alberti y Hemingway, aunque talla literaria, en todo caso, habría que reconocerles.
RépondreSupprimerNo deja de tener su punto de curiosidad comprobar que quienes tanto se agitan ahora en defensa de la cultura son casualmente los que mayor rendimiento económico sacan de ella: "Compañeros y compañeras, vosotros y vosotras, que sois tan de izquierdosos e izquierdosas como yo, pero tenéis los bolsillos vacíos, ayudadme a rellenar los míos". No sé lo que les cantó el otro día Victor Manuel a los mineros, pero la arenga entre canción y canción podía haber sido esa.
Y me callo, porque en el foro de otro insigne (del que escapé poco antes de que la Benemérita viniera a por mí),cada vez que mi comentario pretendía desenmascarar a los farsantes de la chupa agujereada y la cuenta corriente escandalosa me contestaban, poco más o menos: ¿Por qué no criticas igual a Julio Iglesias?.
SupprimerLo grato de este foro es que sus integrantes demuestran más inteligencia y toleran civilizadamente la discrepancia, como debe corresponder a los seguidores de un escritor de talla.
Has dado en el clavo.
RépondreSupprimerRM
Los "artistas" tendrán que apretarse el cinturón porque la "mamandurria" procede de Los parados, los obreros, los autónomos, los escritores, los pintores, los profesores y millones de personas más que lo están pasando fatal.
RépondreSupprimerMe sumo a los que se niegan a aceptar el lenguaje de los políticos del ellos-ellas, de los informáticos ell@s, o del “trapelliense” del ell*s, hay cosas que es mejor dejarlas como están y el o la que se sienta ofendido que se joda, que vale para todos, tal y como ha demostrado la “pajarita” de la Fabra.Fernando
RépondreSupprimerCompletamente de acuerdo. Únicamente querría objetar la forma: la utilización del asterisco o la arroba para abarcar tanto al masculino como al femenino. Me parece que sólo una mente obsesa o perturbada podría interpretar que, en el contexto en que el autor de la entrada escribe, la referencia a escritores, pintores, escultores... alude sólo a hombres/machos/varones y no a mujeres/hembras/señoras... Ya digo: sólo una mente enferma y retorcida podría interpretar tal cosa. Así que esas palabras deberían ir en epiceno (que, aunque se escriba igual, no es lo mismo que masculino).
RépondreSupprimerCuando vi la foto en el periódico me acordé de aquella frase que nosotros citamos tanto, y usted sabrá por qué, "en cuanto oigo la palabra cultura amartillo la pistola"
RépondreSupprimerY así vamos...la folclórica es artista, la noticia cultural del día es la gira de leidigagá, el arte es lo de la Tate (¡tate!), los cuartetos de cuerda viven de "amenizar" los C.A.S.(con permiso don A.), y los intelectuales del país y de el país son los profesionales (o no) del espectáculo. Por lo visto, no está el pueblo para filosofías.
RépondreSupprimerAbsolutamente de acuerdo.
SupprimerComo anécdota, ayer vi la entrevista de Julia Otero a otros dos menesterosos llamados Serrat y Sabina. Al primero de ellos un fontanero le afeó la simultaneidad de sus riquezas y su progresía. A lo cual, airado, don Joan respondió acusándolo de demagogo. Muy digno, siguió diciendo que todo lo que tenía era fruto exclusivo de su trabajo. Encendido y hasta trastabillando, terminó reconociendo que vivía muy pero que muy bien, aunque, desde siempre, su gente no son los ricos sino las gentes de las calles.
Me dio mucha pena que quien durante tantas horas había iluminado mis sueños juveniles tuviera un discurso tan patétíco y tan cínico. Pero la pela es la pela, y si en las barricadas dan buen cava mientras uno se apoltrona recibiendo el frescor del aire acondicionado, mejor que mejor.
Mediterráneos o Cantábricos, todos son iguales.
La pena es que el populacho sea tan simple y no insulte a los políticos y a los farsantes al mismo tiempo. No es tan diferente, parece ser, del que aclamaba a El Deseado a su regreso del exilio.
Están afligidos en exceso y defienden su cultura de subvenciones , porcacultura o parcocultura, me sorprende ver un torero dado que esta gente no se ha pronunciado tajantemente a favor de la defensa de una cultura en peligro de extinción como la taurina.
RépondreSupprimerLos políticos son los reyes del eufemismo barato ya que la mayoría no domina el castellano
Chao
El Almodovar se echa a temblar cuando le tocan el bolsillo. Y es que se le ve que le gusta el buen jamón de jabugo, las gambas y los chorizos y el queso de Brazatortas. Anda y tócate. Trabaja, trabaja. Y si vendes, pues todos tan contentos. Si no vendes, pues, a joderse, como todo el mundo. Pero nada de subvenciones. Ni un euro para esos privilegiadoscarotas.
RépondreSupprimerBien por El País y por Rocío García. Una lucha justa. Y lo de la foto, pues vale, es desafortunada. Al del casting un capón y media paga sin cobrar, que es lo ahora se va a poner de moda. Pero es anecdótico. Además hay que entender que algunas camisas viejas del zapaterismo cultural no asomen la oreja. No debió resultar nada fácil el casting, quizás por eso faltan tantos figuras de la legendaria banda de la ceja. Pero ni ellos, ni los que aparecen en la foto como representantes se enteran. Aquello se acabó. Hoy todos somos del 15M.
RépondreSupprimerComo simple ejemplo, me sorprende que por un lado se critique a la iglesia (y me incluyo en esa crítica) por pretender arrogarse la potestad de decidir en exclusiva sobre el bien y el mal y por otro resulte que lo concerniente a dictaminar sobre la cultura pretenda ser monopolizado por algunos poderes mediáticos y tres o cuatro gurús.
SupprimerMal por El País, cuya actitud en pleno naufragio es impropia de un periódico que se tiene por responsable y civilizado. El hundimiento del barco solo le importa en la medida que pueda beneficiar a sus mentores.Y por que definitivamente llegue a producirse está haciendo lo posible, como hicieron los periódicos de derechas con tal de dinamitar a Zapatero.
Y, perdona, no todos somos del 15M,en todo caso acepto la coincidencia con ellos en el repudio de esta ignominia. ¿O es que sabe alguien con absoluta certeza que pretende en realidad ese movimiento?
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RépondreSupprimerSerrat y Sabina eran muy propalestinos hasta que les dijeron que les pagarían bien un concierto en Israel. Y vaya si fueron, y sin rechistar para nada ni decir allí nada que pudiera molestar a los anfitriones. Vaya un par de farsantes.
RépondreSupprimerCuando Julia Otero le preguntó a Sabina por lo que, para mucha gente, había sido una desafortunada actitud suya en el contencioso Repsol-YPF, el salao andaluz respondió, con no menos cinismo que su colega Joan, que él se debe al lugar donde canta.
SupprimerUn buen profesional se debe a su público, sin duda.
"Menos cultura y más cultivo". Consoladora la cita de JRJ que AT ya trajo por aquí. Como quiera y pueda, lama cada cual la última palabra del lema (cultivo). Lema sin remedio narcisista y ecológico.
RépondreSupprimerCon poco ánimo por todo lo que no está en la foto de la almohadilla, y por mis veintitantos años más, he vuelto a hojear "Ideolojía (1897-1957)". Anthropos. Barcelona, 1990. El azar me ha hecho volver a leer:
"ANTEROS. ¿La cima (que es la sima) de mi antipatía? Una misa de campaña, en una plaza de toros, cosa frecuente en España.
¡El cura, el militar, el torero... y el público de ellos tres!"
... Y no he llegado a desanimarme del todo. De no ponernos demasiado estupendos, metafóricos, al menos esa cima-sima parece superada.
"...actores de teatro, de cine, directores de cine, de teatro..." Ahí ya falta algún asterisco, y en el caso de "actores" habría que escribir "actores y actrices". Lo malo de estos intentos de solucionar lingüísticamente los problemas de género, aparte de la estética y de que los problemas no se solucionan, es que siempre se olvida algo, porque no es natural. Eso sí, surgiría una nueva figura de "correctores de género" con muchísima demanda de empleo.
RépondreSupprimerCon el contenido de la entrada no puedo estar más de acuerdo.
EL MATADERO
RépondreSupprimerViridianesca.
En color, personajes,
composición...
Pues estaría muy bien, señoras y señores, que desplegasen los brazos y que no los escondiesen (cuando la lanzan). O acaso este blog debe ser de lapidarios?.A AT sabido es que le gustan los aforismos y que también en cierta forma figura allí donde también podrían figurar otros, quizás en demasiados catálogos, exposiciones, conferencias, bibliotecas, diarios y premios. Será que trabaja mucho o bien que da un paso adelante. Lo que echa de menos la sociedad es que sus intelectuales den un paso al frente cuando otros (entre los que me incluyo) que tienen menos don de palabra y menos glamour, nos quedamos inmersos en algo que llaman 15M.El 15 M somos nosotros y también los del 15M.Los otros son los que hablan de "mamandurria" y “que no llegan a fin de mes”, Esperanza y toda su mafia política (sí, mafia).
RépondreSupprimerIntelectuales... hagan algo gratuito! Mójense! saquen si fuera necesario a los Almodóvar, Bardem, Botto y si no lo hacen… cállense!.Yo he visto en plena diada de Catalunya a Serrat cantando en castellano entre miles de nacionalistas, por llevar la contraria, por tocar los cojones y también recibir los insultos de los antitaurinos junto a Sabina. Guárdense de las simplificaciones y respeten un poco más. Tener dinero y cobrar por la cultura es digno, incluso ser millonario. Lo que no es digno es ser un fariseo, un envidioso, o un ladrón como los del PP…y tirar piedras.
Dos cuestiones de entrada: que definan cultura esos reclamantes (para que, al menos, sepamos qué reivindican) y después, que alguien nos explique cuáles son los títulos en que basan su reclamación.
RépondreSupprimerEsto sin entrar en la anécdota de p. ej. el sr. Almodóvar, autor de unos engrendros que ponen literalmente los pelos de punta (por decirlo "en planiano") y que es un millonario con una fortuna al alcance de pocos, nutrida en gran parte a base de subvenciones gubernamentales "para la cultura".
David Fdez.
¿Qué pasa que los que somos de izquierda no podemos tener dinero? Estoy harto de oír: Sí, muy de izquierdas pero le gustan los buenos restaurantes, la colonia de Loewe y vestir bien. ¿Por qué no? Cuando el dinero se ha obtenido honradamente, caso de Serrat y Sabina, tienen todo el derecho del mundo a disfrutarlo. Ah y que estos señores de la foto reivindiquen la cultura no empece para que los poetas, los escritores, los profesores, los artesanos también lo hagan.
RépondreSupprimerVaya foto. Vaya tropa. Directamente salidos del Callejón del Gato.
RépondreSupprimerSupongo que esta pancarta es más apropiada
RépondreSupprimerhttp://vozpopuli.com/ocio-y-cultura/12183-sector-audiovisual-y-cine-a-la-derecha-no-le-gusta-la-cultura-para-todo-el-mundo