23 septembre 2012

Una triste historia (2)

TODO lo que llegó a nosotros lo hizo en tres pequeñas maletas de cartón. Todo era nada. La mayor parte de una vida se puede contar en una cuartilla. En una cuartilla rota en mil pedazos hay mil vidas. Papeles rotos, pasaportes, fotos, facturas, recibos, talonarios del Bank of British West Africa Limited. Y cartas, cartas, cartas. Algunas milagrosamente escapadas de la escabechina como Moisés en las aguas del Nilo. Salvadas como él en la crecida. El Rastro como el río de la vida. Cartas misivas de Tomás a Pilar. Casi todas de amor. Las más antiguas. De desamor algunas, cerca ya de la muerte. Tomás pide, Tomás promete, Tomás se queja. Al principio. Después Tomás no escribe, Tomás calla. No hay cartas de Pilar. Si están las de Tomás, es porque el legado de Tomás, que murió separado de ella, volvió a manos de su mujer Pilar. Mujer a distancia, marido errante. Pilar, mujer de los legados. Pilar mar, primero: todos los ríos de su vida, Encarnación, Fernando Villalón,  Ignacio Sánchez Mejías, Tomás, Thomas, Tomy Ríos fueron a morir en ella. Pilar, después, mar de Aral. ¿Volvieron como el bumerán las cartas de la Pilar joven a la Pilar anciana? Si volvieron, ¿las destruyó ella y decidió conservar sólo las de él? No lo sabemos. No lo sé yo. En los despojos no estaban. Muchas de las otras están aquí. Algunas rotas en fragmentos tan pequeños que servirían como nieve en una bola de cristal. En otras la herida es limpia, pero no se atreve uno a leerlas. No deberían haberles sobrevivido. (Continuará)

Sobre con la letra de Pilar López. Carta de Tomás Ríos a Pilar López, 1935, y sobre con sello de Blasco Ibáñez (esta historia la hubiese escrito él) de TR a PL dirigido a la Lista de Correos de Lima, Perú, 1935: "Cuidado con los Compadritos...... ya sé que no hace falta que te haga esta advertencia".

2 commentaires:

  1. Acabo de ver a Pilar cantando " nana de Sevilla " con Federico al piano y se trata de una gran soprano ( la versión de Imperio Argentina tampoco está mal ) .
    Parece que Pilar era una diva , un soplo de aire fresco y modernidad a la que no faltaron admiradores de altos vuelos.
    Chao

    RépondreSupprimer
  2. En tres maletas de cartón cupo siempre el mundo entero. “Todo era nada”. ¿Todo será nada? Que nada sea todo. Suena mejor.

    RépondreSupprimer