23 mai 2013

Los caprichos de la fortuna

¿QUÉ pensaría el señor de Chateaubriand al verse compartiendo ese rincón con los Bonaparte, a quienes tanto detestó (los carteles que se ven debajo se imprimieron, el primero, en honor de uno de ellos, coronado Rey de Roma, y el otro es conmemorativo de la victoria de Austerlitz)? Y sin embargo, hay algo que los une: la excepcionalidad de sus vidas y de sus obras. El otro grabadito (del que se habló en esta página hace tiempo) representa muy bien al pasajero solitario (que tan bien representa a Stendhal, quien admiró sin límites al emperador y respetó en no menor medida el talento literario del conde). A la derecha un plano de la batalla de la flota francesa contra la inglesa en Agadir (ahí empezó todo), y en el extremo inferior derecho una acuarela popular francesa de un santero que va vendiendo imágenes por las casas, entre ellas una de... Bonaparte, regalo esta de la librera de viejo Herminia Muguruza). Y una fotografía de una dama romántica, es decir de cualquier parte, como el romanticismo, aunque hallada en el Rastro (como el resto, excepto la del santero). Todas esas estampas se encuentran, decía en un rincón de la escalera, para recordarnos, cuando subimos y bajamos, los caprichos de la fortuna, maestra de subidas y bajadas.

Las Viñas, 18 de mayo de 2013



6 commentaires:

  1. Trapos indecentes que no tapan ni las vergüenzas, terroristas inidentificables, alusiones playeras desde el podio, futbolistas sodomizados por el respetable, vampirismo bicolor, franquismo soterrado, calzoncillos de tela union jack. No, ni hablar, abrumado por la retórica demócrata este representante de la extrema derecha se tomará un día de descanso.

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  2. "He vivido a caballo entre dos siglos, como entre la confluencia de dos ríos..." Memorias de ultratumba es un monumento literario.

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  3. "Mi cuna tiene algo de mi tumba, mi tumba algo de mi cuna"

    Para mi uno de los grandes capítulos de las Memorias de Ultratumba es el VII donde compara a Napoleón con Washington. Chateaubriand fue de los pocas personas que conoció personalmente a ambos.
    Está transcrito aquí:
    http://prado22.blogspot.com.es/2011/11/bonaparte-washington-y-chateaubriand.html

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    1. Fascinante vida, la de Chateaubriand, que refleja en sus largas memorias. Gracias por compartir el link, Nico Sandoval
      Palco de la Sévigné

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  4. Eugenio Hernando23 mai 2013 à 18:09

    La fortuna es caprichosa , se prodiga tan poco que quien la logre , creerá se trate de un milagro . Un lujo el post que recomienda Nico S. , no conocía a Chateaubriand , se nota es un gran escritor y lo apunto .

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  5. "On m'a pressé de faire paraître de mon vivant quelques morceaux de ces «Mémoires»; je préfère parler du fond de mon cercueil; ma narration sera alors accompagnée de ces voix qui ont quelque chose de sacré, parce qu'elles sortent du sépulcre. Si j'ai assez souffert en ce monde pour être dans l'autre une ombre heureuse, un rayon échappé des Champs-Élysées répandra sur mes derniers tableaux une lumière protectrice: la vie me sied mal; la mort m'ira peut-être mieux".

    En una vieja traducción, el final del párrafo parece apuntar más bien a la idea de ropa:

    “… la vida me cae mal; acaso la muerte me estará mejor.”

    Si se prefiere la idea de estómago, sería algo así:

    “… la vida me cae mal; a ver si la muerte me sienta mejor.”

    Qué difícil traducir, escribir, vivir; a ver si lo más fácil va a ser morir.

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