ACASO lo más vistoso de la revuelta de mayo del 68 fueran sus pintadas, eslóganes, consignas o como quiera llamárselas. Hay en ellas algo de poético y oriental, contagio del Libro Rojo, que entonces triunfaba en París. Algunas de esas pintadas hicieron fortuna (“Sed realistas, pedid lo imposible”) y otras no sabremos nunca si fueron originales o apócrifas, porque cuando cesaron las algaradas la gente, en vista del éxito que habían tenido, siguió sembrando en las paredes frases de cierto efecto. Incluso algunos fotógrafos, con la máquina de fotos en una mano y un espray en la otra, se dedicaron a buscar rincones donde poner una bonita frase y fotografiarla para la posteridad. No sé si mi preferida es o no original, pero, si no lo fue, habría merecido serlo, y no sólo porque negara paradójicamente la revolución de la que nacía, sino porque... ¿quién no ha sentido alguna vez, y aun muchas, algo así: “Parad el mundo, que me bajo”?
Hasta hace no mucho, cuando leíamos cada mañana el periódico, sabíamos que eso era todo lo que había sucedido la víspera, y nos bastaba hasta el día siguiente. Nos decíamos: poco o mucho, con esto tenemos bastante. Cuando llegaba un nuevo día las noticias del anterior nos servían para envolver el bocadillo o enterrar al canario. La sensación que tenemos algunos hoy es bien extraña: mirando cada dos horas en internet no uno sino cinco o seis periódicos y mil páginas más, se diría que nada nos contenta, todo nos deja insatisfechos y ávidos, como si le pidiéramos al mundo... no sé, hechos colosales, récords inauditos, apoteosis que justifiquen esa creciente impaciencia nuestra, pero acaba uno reconociendo con resignación que ninguna noticia está hoy a la altura de la velocidad con la que nos llega ni ninguna parece valer nada, como esos artículos que salen directamente a la venta como saldos. Y ya se apuntó en otra ocasión aquí: cuando sucede algo excepcional y aun trágico (un tsunami, un magnicidio o el hundimiento de las bolsas), se nos presenta en la pantalla junto a la victoria del Unicaja, el divorcio de la diva y un anuncio de champán.
¿Querrías vivir como antes?, le preguntan a uno sus hijos. Decididamente no, y ese es también un problema, porque no siendo un amish, ¿cómo prescindir de todo esto? Sin embargo... Apenas se ha familiarizado uno con su móvil o su tele o tal o cual electrodoméstico (del ordenador ni hablamos), sale al mercado uno nuevo que llega a tu vida con un voluminoso manual de instrucciones escrito en treintaidós idiomas, no por ello comprensible en alguno. Se creería que esos prospectos estuvieran escritos en el lenguaje de los hijos, pero a ellos, que tampoco los entienden, no les importa mucho perder una tarde en averiguarlo. Es entonces cuando uno aprovecha para recordar con nostalgia los días en que las cosas sucedían con cierto sosiego porque no caducaban a las doce horas. Cada doce horas, si pudieran, nos cambiarían la dieta, los hábitos, los móviles, los tipos de interés... todo, menos la vida. Lo único que está pidiendo a gritos, como una pintada del 68, que cambiemos de una vez.
[Publicado en el Magazine de La Vanguardia el 15 de diciembre de 2013]
Somos muchos los que no querríamos vivir como antes porque el progreso es evidente y no estamos dispuestos a renunciar a sus ventajas. Pero ese sentimiento lo experimentamos como balance global, lo cual no quiere decir que abominemos de muchas astracanadas de la actualidad. Una de ellas sería, a cuento del artículo de hoy, la constatación de la frivolidad con que se hace noticia de todo debido a que muchísimos viven precisamente de informar y para sobrevivir nos magnifican la caída extemporánea de una hoja en Chile o cualquier estupidez deportiva. Con la previsión del tiempo, verdadero espectáculo, se ha creado un mundo de miedos, sustos y alertas catastrofistas que luego quedan en la mitad de la mitad, igual que leer los titulares en internet o en los teletextos de las denominadas “últimas noticias” produce casi siempre verdadera indignación. Desde luego que no es cierto que cualquier tiempo pasado haya sido mejor, pero el presente lo vivimos entre apocalipsis reales y falsos malamente dosificados. Y eso tiene muy poca gracia.
RépondreSupprimerMagnífico, gracias. Cambiar la vida... Un anhelo tan arraigado y al mismo tiempo contra lo que uno se resiste una y otra vez... Le leo cada día y siempre siento que tiene usted la palabra que duele y al mismo tiempo hace bien...
RépondreSupprimerEl cambio en sí mismo no es bueno, es inevitable. Lo malo es cambiar a peor. Dos ejemplos:
RépondreSupprimerDe la República de Weimar al nazismo; De la república española a la guerra y a la violenta y primera postguerra.
"Parad el mundo, que quiero bajarme" fue una pintada de Mai 68 tomada de una canción de Bob Dylan.
RépondreSupprimerOtras célebres:
Il est interdit d'interdire.
Sous les pavés, la plage.
L'alcool tue. Prenez du LSD.
Élections, pièges à cons.
Aimez-vous les uns sur les autres.
L'imagination prend le pouvoir.
Seule la vérité est révolutionnaire.
Pas de liberté pour les ennemis de la liberté.
Je décrète l'état de bonheur permanent.
Ils pourront couper toutes les fleurs, ils n'empêcheront pas la venue du printemps.
Je participe, tu participes, il participe, nous participons, vous participez, ils profitent.
Je prends mes désirs pour la réalité car je crois en la réalité de mes désirs.
Je suis marxiste, tendance Groucho.
Jouissez sans entraves.
La marchandise est l'opium du peuple.
Ne nous attardons pas au spectacle de la contestation, mais passons à la contestation du spectacle.
Ne prenez plus l'ascenseur, prenez le pouvoir.
Sobre el fondo del asunto:
RépondreSupprimer"Tout le monde parle de progrès, et personne ne sort de la routine."
(Emile de Girardin. Etudes politiques -1838-)
"L'homme moderne est l'esclave de la modernité : il n'est point de progrès qui ne tourne pas à sa plus complète servitude."
(Paul Valéry. Regards sur le monde actuel -1931-)
Exacto,
SupprimerPaul Valéry es mejor poeta de lo que El Lejano cita.
RépondreSupprimerLo que yo cito no es poesía. "Regards sur le monde actuel" es un libro de textos políticos.
SupprimerJe déclare l'état de bonheur permanent et le droit de chacun à tous les privilèges."Declaration".Georges Moustaki.
RépondreSupprimerAndrés Trapiello y su salón.Ese lugar del que no apetece nunca salir.
Saludos y gracias.
Lo que llegó aquí del 68 fue Brigitte Bardot , Alain Delon y quizás el yo te amo de Serge G y Jane Birkin , puede se pusiera de moda leer a Moliere pero no significó nada , luego ha resultado que fueron muchos dicen que estuvieron allí y lo contaban como si allí hubieran estado los más listos de la historia , en esa época el festival de
RépondreSupprimerWoodstock 69 considero fue clave para europeizar la mente de los españoles .
Llegará el día que seremos sometidos al juicio diario , solo nos tendrán que poner un chip de " obediencia debida " y una maquina individual de control donde deberás meter el brazo todas las noches y si has hecho algo malo te retendrá a la espera de ser detenido , puede que el ser humano deje de soñar si los sueños fuesen juzgados como hechos . Mas nos valía retroceder pero hemos dejado migas de pan en el camino que emprendimos
«Los dioses han ocultado a los hombres las fuentes de la vida». (Hesíodo)
RépondreSupprimerAlgo así:
RépondreSupprimer“Rocío, el mundo
es rocío: eso es todo.
Y sin embargo...”
KOBAYASHI ISSA ― fuera del mundo, lejos ya del infierno, viendo las flores.
Papel de arroz,
Supprimerjaponés, tinta china:
mucho mejor.
El capitalismo existe desde los orígenes del comercio pero la clave es aumentar la esperanza de vida . Los europeos y norteamericanos consumimos el 90% de lo que factura de La industria farmacéutica , mientras se produce un genocidio limpio con el resto del planeta , salvo los blancos de Oceanía y de Africa y Japón . No existe país en el mundo de etnias de color en el que no haya guerras y esclavitud y todos somos cristianos , de hecho lo del lobby judío es un invento y lo que no soportamos es que se pueda producir la destrucción de Jerusalem ( habrá pero este año se bate el récord de menores españoles que van a Roma de excursión ) , . La tecnología hace que la gente sea mejor y combate el aburrimiento y a los corruptos ; la tecnología es el Dios verdadero y te hace dudar si es que somos de aquí o hemos venido a baños .
RépondreSupprimer"La paz es tan bonita como el mar", leí en una tapia de colegio. Realizado por niños, seguro.
RépondreSupprimerhttp://www.youtube.com/watch?v=f8KbRQJrGxo
Apacible, liviano...