3 juillet 2014

Le Sidaner / Van Gogh

UNA de las cosas que más conmueve en la correspondencia de Vincent Van Gogh es asistir a la ilimitada capacidad de este para admirar la obra de un sinfín de artistas, que él pudo conocer en muchos casos únicamente por grabados y reproducciones deficientes en las revistas ilustradas y artísticas a las que era aficionadísimo, quitándose literalmente el pan de la boca para poder hacerse con ellas. 
En la mayor parte de esos artistas, a los que muchas veces versionó o copió, buscaba el sentimiento del paisaje, de un rostro, de una figura, de un ambiente, más que la perfección formal y académica y el virtuosismo que no obstante valoraba en otros. Algunos de estos artistas, Millet, Daubigny, eran célebres cuando Van Gogh empezó a pintar (y no hemos de olvidar que Van Gogh empieza a pintar a la edad de 27 años y muere apenas diez años después), pero la mayoría no lo eran en absoluto. Eran jóvenes como él, que se abrían camino, y con los que Van Gogh era sinceramente generoso admirándolos. Siempre veía en ellos "algo" que lo conmovía, aunque a menudo reconociera que ni eran grandes artistas ni grandes obras. Pero ese "algo" era para él "todo". Uno de estos fue Henri Le Sidaner, uno de esos pintores que la posteridad destierra a ese vasto continente que llama "lo menor", tan lleno de rincones, jardines y fortalezas maravillosos. . No es probable que Van Gogh llegase a ver ninguna de sus obras, sí que Le Sidaner conociese las de Van Gogh. No se parecen en absoluto, aunque en muchas de ellas podamos encontrar un espíritu común.
Y eso es precisamente lo que parece haber descubierto en La choza en los lindes de Étaples, obra de Le Sidaner, el fotógrafo Juan Manuel Castro Prieto: lo que en él había de vangoghiano, añadiendo a ella cierto misterio que no había en el original (Castro Prieto ha "encendido" la luz de la choza, muy apagada en el original pictórico), ese "algo" especial que es ya "todo" y de todos.



6 commentaires:

  1. “La tela siempre tiembla”. Como el papel, silicio o lo que sea.

    RépondreSupprimer
  2. ¿Por qué lo diré y aquí . . .? Me topo. Hoy,
    leyendo a Argullol, pensé . . . ((¿ . . . de dónde
    salido, importa (¿cuál . . . cómo?) . . . habiendo
    (¿ . . . cuál sé?) . . .para qué?)) . . .cuántos
    … quien con hambre, sed (y en cuánto modo);
    desahuciado, ahogándose, sin trabajo…
    (A cada hora está naciendo.
    Cantaré el villancico ahora)
    .
    Azorado; fuera un modo
    de acoger.
    Vea, en puerta tan pequeña
    y en la casa,
    nuestro brillo;
    (no era el oro ni el de altos)
    azorados.
    .
    .
    .
    (Qué mal atiende nuestro diccionario a lo más hermoso
    en la hondura de la palabra)
    ACNUR. (Contra los mil modos de dejar clavados)

    RépondreSupprimer
  3. El fotógrafo Vincent Brady hace unas fotos que tienen similitud con las pinturas de V.G. , hay un video de este artista en YT llamado " panoramas - 360 degree - night - sky time - lapse " que resulta asombroso .

    RépondreSupprimer
  4. El juego lo hubiera podido completar Castro Prieto mediante la siempre sugerente composición diagonal, situando en la esquina superior derecha una pequeña luna, apenas encendida.

    RépondreSupprimer
  5. En muchas partes me desencuentro mirando
    a otro lado; a, hoy aquí, Byung-Chul Han,
    y aun a él no lo atiendo (rogaba silencio).
    ¿Seré perdonado?
    .
    “A MUERTE”
    .
    _ Hay un “van…
    a la muerte” (los matan),
    que hay un “van… … …”;
    “a muerte” van y mataban
    (¡mataban!); eso es todo
    … (¿todo?)… lo matan
    (y, con todo, lo propio que hay en lo otro)

    O… tro hay… “van…”
    _ No lo digas; calla.
    _ A muerte. Hasta la muerte…
    _ ¡Calla!, que confundimos
    el qué y el cómo (en…
    “de balde”) y quién paga;
    incluso el cuánto, si hay paga
    (y cuál donde y con quién…
    van).
    _ … andando con gracia.
    .
    _… que…
    no… es…sin
    … ¿comer?
    _ Y…
    (en andando) hay el en…
    en la gracia… de un
    (“aclarándose alrededor”,
    en la gran confusión)… un cómo y un qué
    y el cuánto y el quién, que de balde que andaban
    con gracia.
    .
    ¬_ Ay…, quién…
    (en la gloria)
    ¡…mirara!
    .
    .
    Frmdo: ACNUR.
    (Contra los mil modos de dejar clavados)

    RépondreSupprimer
  6. Hermoso el contenido y la forma!
    Gracias!

    RépondreSupprimer