CON este título escribió Eusebio Blasco, autor de unas amenas Memorias íntimas, un tomito de semblanzas de artistas, literatos, aristócratas, banqueros, políticos y actores: García Gutiérrez, Núñez de Arce, Bécquer, el Duque de Osuna, Galdós, Manzanedo, Gayarre, Manuel Catalina y otros.
Es un libro pequeño de lectura grata y ligera que le asoma a uno a la vida de la Restauración, pero principalmente importante por el retrato que hace de su amigo Gustavo Adolfo Bécquer a poco de morir este.
En el arte del retrato pictórico o de la semblanza literaria, la importancia unas veces es del retratista, otras del retratado y, en fin, excepcionalmente del retratista y retratado juntos. Es seguro que de no haber descubierto entre los nombres de los retratados el de Bécquer o el de Galdós no habríamos reparado en él, y cierto que sólo por el retrato del primero de ellos valió la pena.
"No seré yo biógrafo de ninguno de mis amigos o contemporáneos, pero procuraré hacerles un retrato moral, que es lo que en lenguaje modernos llamamos semblanzas", nos adelanta Blasco.
La primera enseñanza es, acaso, la ceguera o miopía de las que todos estamos aquejados para juzgar el presente o por buscar los contemporáneos entre los vivos y no entre los muertos, donde más fácilmente los hallaremos, y así Blasco nos pinta a Núñez de Arce como un grandísimo poeta: "Ha llenado un gran vacío en nuestro tiempo, y por eso su nombre quedará", asegura con firmeza. Y tras ver cómo la vida de la mayor parte de esos grandes hombres y mujeres se nos queda entre los dedos como el polvo de una mariposa, nos adentramos en el retrato de Bécquer sin esperar nada especial, y acaso por ello, recibiendo de Blasco tan preciosos detalles. (Continuará)
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| Eusebio Blasco, Mis contemporáneos (Semblanzas varias). Francisco Álvarez, Madrid, 1886 |
Siento melancolía al saber sobre la vida de Bécquer. Lo que llevo de él no es el hombre sino su obra, esas Rimas que con 14 años leí (aquel libro de las tapas verdes) y me subyugaron. Volverán las oscuras golondrinas. Del salón en el ángulo oscuro. A veces me la encuentro por el mundo. Los suspiros son aire y van al aire...
RépondreSupprimerLlevaré esos versos conmigo hasta que la muerte o el alzéimer me los arranquen, pero ahora apenas me dicen nada.
¿Cómo se puede cambiar tanto? ¿Cómo es posible que lo que una vez me apasionó, me entusiasmó..., pueda ahora parecerme cursi y afectado, o pueda incluso dejarme indiferentes?
Mirar hacia atrás en busca de felices descubrimientos no parece resultar demasiado interesante para nuestra civilización, tan ocupada en ensalzar hasta el mito a los protagonistas del presente, para enterrar enseguida sus restos en cuanto un candidato al trono reclama notoriedad.
RépondreSupprimerMientras escribo recuerdo a Juan Ramón, a su figura denostada, a la injusticia con que unos y otros se han obstinado en ocultarlo en el anonimato, al deseo infame de ignorar su heroísmo y el de Zenobia durante la guerra. Es como si se hubiera firmado un pacto siniestro para convertirlo en uno de esos muchos personajes malditos que cuando se revisa su biografía resulta que deberían ocupar los altares.
Si no he leído mal, en algún sitio me pareció intuir que esa reivindicación de su talla literaria y sobre todo personal,podría ser emprendida por Andrés Trapiello....
Hay una edición, en tapa blanda, publicada en 2011 por ¡una editorial británica! (Lightning Source) de las "Semblanzas varias" de Eusebio Blasco. Saludos
RépondreSupprimerEsa "edición" debe ser una de esas "print on demand", como dice su página web:
Supprimer"Books printed one at a time on demand" y "Lightning Source does not provide design, file work, editorial, promotional or marketing services". Es decir, reproducen cualquier libro que ya exista y esté libre de derechos, como es el caso. No se imagine por eso que hay una editorial británica interesada en Eusebio Blasco
Aquí se puede leer el libro o descargarlo en pdf
RépondreSupprimerhttp://archive.org/details/miscontemporane00blas
Gracias al Anónimo por el enlace.
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