EL cuervo llegó el otro día al fbook de M. Hoy, del dominio de Carlos García-Alix, esta pintura de Julius Olson Nordfeldt, que nos recordó a otra de Ma Yuan. Esta se la mostró un día Ramón Gaya al amigo José Luis Escartín. Dejemos que sea este quien lo cuente: "Me iba enseñando un libro de pintura china, pasando las hojas, y al llegar a la reproducción del pescador de Ma Yuan me dijo: «Fíjate, el tema de ésta es la atención». En el libro recuerdo que también había cosas de Sengai, que le hacían gracia por la frescura de los dibujos, que son casi como caricaturas, sin ninguna solemnidad, pero hechas por alguien. Lo de la atención convierte al pescador en un meditador, que como en el zen, consigue durante ese instante que el observador desaparezca absorbido por lo que observa, identificado con ello".
Pues la atención es, para un artista, pese a la penumbra o niebla en la que a menudo se sostiene, condición necesaria para esa aparición cegadora tan súbita como fugaz a la que llamamos revelación y que a menudo, justamente debido a nuestra distracción, muerde el anzuelo, lo suelta y se va, dejándonos de vacío, dejándonos su vacío.
Miro la hormiga que anda por la pared: soy esa hormiga; o el ciprés en el patio. Eso esfueserá todo.
RépondreSupprimerclaro, la revelación es también la chulapa ballena blanca que el pescador y el escritor inmóviles en su chalupa anhelan.
RépondreSupprimerSe ve que a las brumas también le sientan bien los sepias.
saludos
El arte de estar atento es instalarse en la realidad, tan profundamente en un instante, que éste se hace eterno.
RépondreSupprimerLa de Ma me gusta mucho mas , refleja mejor al " homo spiritualis " , que es en realidad lo que somos . No creo seamos sapiens ( aunque excepcionalmente existan sabios )
RépondreSupprimerSaludos
Raro que nadie mencione hoy, ni siquiera el anfitrión, que lo sacó en un diario, "El perfecto pescador de caña", de Izaak Walton.
RépondreSupprimerDicho esto, ahora voy a demostrar que no soy un robot. Hasta otra.
Ahi va:
Supprimer"Y sobre todo seamos amantes de la virtud; confiemos en la providencia; seamos sosegados y vayamos a pescar con caña."
"Esforzaos en ser sosegados"
Izaak Walton. "El perfecto pescador de caña"
La Veleta - Granada 2000
Gaya y Julius he visto se parecen mucho y ambos tienen obras taoistas , Gaya si logra como el chino la unidad del hombre con la naturaleza y Julius parece que los junta para el cuadro .
RépondreSupprimerchao
MÍNIMO CUERVO
RépondreSupprimerUno, modesto, de un tal Francisco Delgado en un hilo de la red que ya no existe: http://ttt.teleco.upv.es/
“Cielo mojado,
hay cuervos en la torre.
Mañana me voy”.
Y otro bien esponjado en un lugar que sí existe:
http://blogs.periodistadigital.com/elalmadelhaiku.php/2009/07/01/p239090
Podo bien poco:
«Cuántas veces hemos leído el famoso haiku de Bashô
Tarde de otoño
Un cuervo posado
en la rama de un árbol
Como quiera que contamos con dos versiones originales de este haiku, con una excelente explicación de Nôichi Imoto (profesor de la Universidad de Ochanomizu y también rector de Jissen-Joshi daigaku) en el clásico Bashô niumon (“Bashô para principiantes”, 1977, página 11), y con una pintura con caligrafía del propio Bashô
http://www.wul.waseda.ac.jp/PUBS/kiyou/53/pdf/04-kuchie.pdf
podemos saber que:
1) No era un cuervo lo que se posó sino muchos; unos estaban posados y otros sobrevolaban el árbol
2) No era una rama sino muchas
3) Esas ramas estaban secas
4) No estaban quietos sino con movimientos naturales
Este haiku se ha presentado tradicionalmente como “un paisaje zen”, un paisaje de wabi-sabi, de quietud, de sequedad, de soledad. Pero no fue así como lo experimentó Bashô.
Las dos versiones que escribió Bashô de este haiku son las siguientes:
1) la primera cronológicamente (a la que corresponde el haiga) es:
枯枝にからすのとまりたるや秋の暮
Kareeda ni karasu no tomaritaru ya aki no kure
En las ramas secas
se están posando unos cuervos
Atardecer de otoño
2) En la versión posterior leemos:
かれ枝に烏のとまりけり秋の暮れ
Kareeda ni karasu no tomarikeri aki no kure
En las ramas secas
se posan unos cuervos
Atardecer de otoño
La diferencia entre tomaritaru ya y tomarikeri es de un mayor o menor movimientos en los cuervos que se posan en el árbol (...), sin llegar nunca al “están posados” del paisaje zen.
En idioma castellano tenemos ciertos matices, que se corresponden más o menos con el japonés coloquial:
• Si los cuervos “van a posarse” y aún no han tocado el árbol, diríamos en japonés tomarô to shite iru
• Si “están posándose”, diríamos ima tomatta tokoro da
• Si ya “se han posado”, ya se han acabado de posar, pero se mueven de forma natural, miran de una lado a otro, cambian de posición incluso, emplearíamos tomatte iru
• Pero lo pétreo y definitivo de ese "está posado" castellano, por el que contemplamos un cuervo detenido en su rama, inmóvil, observando la soledad del paisaje y la del poeta, no puede decirse en japonés; al menos no puede decirse sin hacer un largo circunloquio.
La impresión que recibió Bashô fue más de algo extraordinario, sobrecogedor, insólito, amenazante (veintisiete cuervos en torno a un mismo árbol), que sereno, profundo, solitario, quieto. (…)»
El realismo mágico , el que conocemos por los artistas de las cavernas , la gente tenia poderes paranormales . Puede que Dios no exista pero estamos aquí porqué los primitivos creyeron en él , ser iconoclastas es lo que nos diferenció de otras especies y nos dio la osadía de quien confía en la suerte .
RépondreSupprimerSaludos
"A menudo", qué envidia. Quién pudiera.
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