DEJEMOS de lado el camino recorrido por esta fotografía, que bien pudo haber salido de la cámara de Eugène Atget y que la ha traído hasta el Campillo del Mundo Nuevo; olvidemos por un momento la mirada de esos personajes que parecen, mirándonos desde la muerte, decirnos: "Levántame y ándame"... Reparemos tan solo en el rótulo de ese modesto Hotel du Lion d'Or, tan común en hospederías, posadas y cafés. ¿Qué encierra ese nombre, dónde surgió la leyenda de un león dorado? ¿Fueron estos que comparecen sus dueños y quienes atendían el modestísimo establecimiento? ¿Entregaban copias de esa fotografía a sus huéspedes ilustres como vimos el otro día que hacían en el buque Montevideo? ¿Fue uno de ellos quien la trajo a Madrid hace más de cien años?
Maravillosos tiempos en los que alguien podía empezar a relatarnos esa historia que nos incumbía porque teníamos tiempo aún de escucharla.
―No me mires tanto, que ya lo sé: entonces no llegaba a los pedales y ahora tampoco.
RépondreSupprimerSí, es curioso, muchos leones dorados o rojos, casi tantos como swans blancos y negros en posadas y pubs británicos. Aquí los ejemplos no suelen ser coloreados, aunque haya alguna famosa rana verde.
RépondreSupprimerUna lámina de ese sepia caduco y melancólico que llega justo en el momento de irse a la cama y que uno observa con el cerebro domado del niño que escucha el cuento para dormir. Buenas noches...incluso whites.
Un profesor de literatura aficionado a las palabras nos contaba durante mi lejano bachillerato que esa especie de franquicia no registrada tendría su origen en una expresión más descriptiva y prometedora, aunque menos poética: Au lit on dorme, reclamo directo de paz transitoria para personas en marcha por ciudades ajenas. Si no es verdad al menos resulta verosímil. O gracioso. Mayores degeneraciones lingüísticas hemos visto.
RépondreSupprimerTambién me parece recordar (dentro de mi propia nube) alguna mención al asunto en mis tumultuosas lecturas barojianas de juventud.
Luego ya, con el desarrollo, las fondas empezaron a ofrecer vistas, confort, esmerado servicio, limpieza y T.I.. Pero eso era vivir por encima de nuestras posibilidades. Enseguida volvemos a dormir a la cama, a media pensión como mucho.
Baroja tiene una novela titulada "El hotel del cisne".
SupprimerPor casualidad, tras leer esta entrada he encontrado esta foto de otro Hotel Du Lion d'Or en Sevilla, en la página de la Fototeca del Patrimonio Histórico, que es interesantísima.
RépondreSupprimerhttp://www.mcu.es/fototeca_patrimonio/Visor?usarVisorMCU=true&archivo=RUIZ VERNACCI/preview/VN-15541_P.jpg
¿ Un Lion d'or ? Lionel Messi , 45 mill. de € al año dando patadas al balón , leyenda en activo del fútbol , y ejerciendo de imagen de multinacionales , es un filántropo . Le pusieron Lionel porque nació pequeñín y supongo tendrá ascendencia francesa , en castellano
RépondreSupprimerseria Leonel ( él como diminutivo prefiere Leo que Lio , la e vende más que la i )
Preciosa foto y puede ser en tantos pueblos de Francia. En Bretagne estuve en un Lion d'Or que tiene un restaurante maravilloso y unos desayunos increíbles, flanes caseros como los que hacía mi abuela. El sitio está cerca del Mont Saint Michel y también de Combourg, a los que les interese visitar el château de Chateaubriand. Amables, en invierno estaba vacío. http://www.hotel-leliondor.fr/
RépondreSupprimerAtget hizo fotografías increíbles de toda la región parisina, muchas están en colecciones norteamericanas porque fueron vendidas antes de que se valorara en el mercado su trabajo.
Mi ancestro bretón huyó en barco desde las islas bretonas cuando cayó Napoleón , con él vino un hermano menor y una señora que cuidaba de ellos ( trajeron 15 colchones de lana , ajuar y dinero ) , estos se asentaron en el norte de España y todos los que llevamos el apellido descendemos de ellos , nos conocemos todos por internet y ahí empezó el empeño hace años por seguir la genealogía . Mi padre decía que éramos franceses pero no sabia de donde , el caso es que cuando la revolución cambió el nombre de varios pueblos en Bretaña y pensé que mi apellido raro podía pertenecer a algún pueblo bretón , el caso es que di con un mapa de principio del siglo XVIII y allí encontré que mi apellido coincidía con el de un pueblo que luego cambió de nombre .
RépondreSupprimerEstas cosas no interesan prácticamente a nadie , pero es una bonita verdad .
Las grandes historias están hechas de pequeñas historias.
Supprimerhttp://www.mutualart.com/Artist/Eugene-Atget/4346FF4AD3E89916/Artworks?Params=3131392C43757272656E74546162416C6961732C417274776F726B732C317C3936382C43757272656E74506167652C342C31
RépondreSupprimerDocenas y docenas de hoteles entre quizá miles de fotografías de Atget ordenadas “alfabéticaóticamente”: Ancien… Au Lion D'Or (cabaret, no hotel) 16 Rue Volta (3e) (1908)… Au Port Salut Cabaret, Rue des Fossés, St. Jacques, 1903 (1903)… Au soleil d'or - place de l'Ecoles (7e arr) (1902)… Bagatelle, Balayeur, Balcon… Cabaret de l'ange Gardien repaire de Apaches du quartier 9 Rue Pirouette (1e) (1907)… Carrousel (1923)… Décrotteur (1899)… Eclipse, 1911 (1912)… Façade, Faucheurs, Femme… .
Desde la entrada al León de Oro, también unos niños mirándonos serios. Qué lejos entonces de las “selfies”. A la puerta de boutiques, cabarés…, frecuentes y “acusadores” testigos: “La casa sigue negra, Obamas y Obamitos. Menos, menos guasa, supervivientes”.