Para Andrés Rábago, el más cuerdo de los profundos
UN sueño. No debemos contar a nadie, por delicadeza, lo que soñamos. Todos soñamos, y no hay sueño que no sea prodigioso, inaudito, insondable. Claro que sólo para el que lo sueña. A quien se cuente el sueño lo encontrará probablemente ridículo, y acabará impacientándose, conocida la inoperancia de todos ellos sobre la realidad. Yo soñé ayer la cubierta de un libro de Kafka que se titulaba Lógica y que editaba en Peligros, el pueblo granadino donde estaba antes La Veleta. Hace años que Comares se fue de allí. Se veían en la viñeta una máquina de escribir antigua y unos guantes de boxeo colgando en medio de una gran biblioteca. Deseé ser un rey persa y consultarlo con mis astrónomos, caídos en descrédito los psicoanalistas. Me levanté y lo dibujé todo como mejor supe, tal y como lo había "visto". Al acabar, comprendí que quizá se tratara de un proyecto larvado y monumental. Desarrollé la idea, temiendo que ya estuviera patentada. Al ir dibujando la segunda portada (Mecanobox, que está pidiendo a gritos también su propio desarrollo: Metabox), me decía: ¿Pero no tienes otra cosa en la que perder el tiempo? Me consolé pensando que en un 1º de Mayo era una manera bonita de homenajear a todos los que no tienen trabajo, y si Nietzsche habló de cómo filosofar a martillazos, quizá, por cortesía, por delicadeza, y sin llegar a tanto como él, pudiéramos empezar nosotros a escribir con guantes de boxeo. En fin, todo absurdo. Me voy a despertar. Ya estoy despierto, y lo inquietante no es que el dinosaurio del paro sigue aquí, sino que haya parido. Trillizos.
UN sueño. No debemos contar a nadie, por delicadeza, lo que soñamos. Todos soñamos, y no hay sueño que no sea prodigioso, inaudito, insondable. Claro que sólo para el que lo sueña. A quien se cuente el sueño lo encontrará probablemente ridículo, y acabará impacientándose, conocida la inoperancia de todos ellos sobre la realidad. Yo soñé ayer la cubierta de un libro de Kafka que se titulaba Lógica y que editaba en Peligros, el pueblo granadino donde estaba antes La Veleta. Hace años que Comares se fue de allí. Se veían en la viñeta una máquina de escribir antigua y unos guantes de boxeo colgando en medio de una gran biblioteca. Deseé ser un rey persa y consultarlo con mis astrónomos, caídos en descrédito los psicoanalistas. Me levanté y lo dibujé todo como mejor supe, tal y como lo había "visto". Al acabar, comprendí que quizá se tratara de un proyecto larvado y monumental. Desarrollé la idea, temiendo que ya estuviera patentada. Al ir dibujando la segunda portada (Mecanobox, que está pidiendo a gritos también su propio desarrollo: Metabox), me decía: ¿Pero no tienes otra cosa en la que perder el tiempo? Me consolé pensando que en un 1º de Mayo era una manera bonita de homenajear a todos los que no tienen trabajo, y si Nietzsche habló de cómo filosofar a martillazos, quizá, por cortesía, por delicadeza, y sin llegar a tanto como él, pudiéramos empezar nosotros a escribir con guantes de boxeo. En fin, todo absurdo. Me voy a despertar. Ya estoy despierto, y lo inquietante no es que el dinosaurio del paro sigue aquí, sino que haya parido. Trillizos.
Tiene muy buena pinta el libro. Yo lo compraría, seguro.
RépondreSupprimerSigue soñando porque hacen falta muchos sueños como los tuyos. Saludos
RépondreSupprimerEl boxeo, ese deporte estigmatizado y sin embargo bello y dramático, emerge desde el subcosnciente, para alegría de tipos como yo que todavía disfrutamos de las veladas en directo.
RépondreSupprimerKafka, Nietzsche, ¿tendrían ellos sueños de Superhombres? Me refiero a si tendrían sueños voluptuosos, claro, de esos que te despiertas musitando... joooder.
RépondreSupprimersaludos
Esto es un sueño maravilloso y una lección de respeto. Un poema inefable, gracias.
RépondreSupprimerEl sueño dicen fue la primera ficción, de hecho creo que los cavernícolas no distinguían la realidad del sueño. Es bueno recordar los sueños para saber lo que podemos llegar a ser o hacer.
RépondreSupprimerSaludos
Muy bueno, Noble Arte VS Arte Noble, Tyson tecleando una Olivetti , seria un realismo mágico o un surrealismo certero
RépondreSupprimerNo me despertaré sin una mala noticia por conocer
chao