Acabo de ver tu diario del domingo, donde te encebollas por enésima vez con el asunto de mi traducción del Quijote, subiendo el tono con ese "completo disparate" y "poco ducho corrector de estilo". A cualquiera que se le diga que hablas de los pronombres enclíticos, no lo creería.
Que tu nota lleve fecha del 3 de noviembre, pero que se haya publicado el 8, habiendo entremedias un viernes (santo) 6, día de mi intervención en la presentación que tú me pediste que hiciera de tu libro, con lo que allí sucedió, no es sino la confirmación de que no necesitas años para vengarte ni para mentir (o no contar toda la verdad) ni para el pellizco de monja: para dar el cambiazo te bastan a ti un par de días.
Te dije este sábado, respondiendo tu carta, que yo ya te había "perdonado" lo del viernes, que no "olvidado", (como citas (mal) en tu libro, malditas comillas); te lo digo, porque creo que me acordaré siempre de lo bien que me lo pasé esa tarde. ¡Tenemos incluso una grabación del acto!
Sigue bien, cuídate y no cambies por nada del mundo.
Por cierto, te decía hace un par de meses que no sabía si enviarte o no el nuevo tomo del Salón de pasos perdidos. No lo haré y le pediré a los pretextos que no lo hagan tampoco. Sabiendo el mucho gusto que te dará escribir de él, a tenor del aperitivo que anuncia la nota del 3 de noviembre, he pensado que es mejor que cada cual se pague sus propios vicios. Sé que lo entiendes.
No dejes de llamarme si vienes alguna otra vez por aquí. Seguro que para entonces no estaré tan liado como lo estoy estas semanas.
Un abrazo
A.
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EL diario hay que enviarlo días antes al periódico, amigo Andrés (para la ilustración). La nota del viernes corresponde al próximo domingo.
Un abrazo
JLGM
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NO sabes lo tranquilo que me quedo sabiendo que acudías a la presentación con esas finezas tuyas en la cartera, ya preparadas, para darme las gracias por leerme tu libro, idear la presentación, cruzar Madrid en taxi y dedicarte dos horas, una de ellas, casi entera, hablando de alguien cuyo lema, como dije allí, no es el guilleniano "el mundo está bien hecho", sino "yo estoy bien hecho". Esta es una suerte que no se tiene todos los días.
Y si vas a escribir del asunto, atención con las comillas, que sueles usar algo a la ligera. Como aquí hay una grabación, y dos docenas de testigos, no te costará ponerlas bien.
Y si vas a escribir del asunto, atención con las comillas, que sueles usar algo a la ligera. Como aquí hay una grabación, y dos docenas de testigos, no te costará ponerlas bien.
Sigue bien
A.
¿Puede verse la grabación de ese acto en algún rincón de internet?
RépondreSupprimerSupongo que estará en la página de la librería Alberti.
SupprimerA usted ¿le desagrada que se trate o se debata sobre su traducción del Quijote?
RépondreSupprimerA partir de otos comentarios entendí que usted estaba sobradamente seguro y satisfecho de su trabajo, y que le resbalaba cualquier discrepancia.
Hasta hoy, la verdad, los argumentos en contra me han parecido poco o nada relevantes, dictados a menudo por los prejuicios. Los de JLGM también; estos además vinieron a las pocas horas de publicarse el libro, que él no leyó. Como mucho lo espió. Si no he entendido mal, el crimen de lesa literatura es haber traducido "que él dijéramelo", por ejemplo, como "que él me lo hubiera dicho", ya que los pronombres enclíticos los entiende todo el mundo, sobre todo en Asturias, donde se siguen empleando. De hecho le habría gustado más que yo hubiera traducido el Quijote al bable, pero sabiendo que alguien lo estaba traduciendo ya a esa lengua (traducción que le habrá parecido de perlas, como me lo parece a mí), me resigné al español moderno, lengua menos necesaria pero también vistosa.
RépondreSupprimerY este recordatorio. Dice al final de su reseña de mi traducción JLGM que él lee ese Quijote "sin acordarnos de si la prosa que estamos leyendo es la que escribió Cervantes o la que retocó Trapiello". Es a lo que yo llamaría una buena traducción, y lo que ocurre cuando no nos vencen los prejuicios. Yo, si la traducción es mala, no logro olvidarme nunca del traductor.
SupprimerConozco muy bien el uso y abuso que en Asturias se hace de determinados pronombres enclíticos, como el citado dijéramelo.
SupprimerLa presentación que el pasado viernes hizo AT en la Alberti del libro de JLGM resultó muy amena e incluso divertida en bastantes momentos, como celebramos con carcajadas los más de veinte asistentes. Por eso diría que más que un match entre dos contendientes que se profesan amor-odio, percibimos un partido de exhibición, como si al raquetazo de uno él otro respondiera con un espléndido revés desde el fondo de la pista porque el guión del espectáculo estaba más o menos escrito a medias.
Este desencuentro que ahora se nos ofrece parece una continuación, la del tiebreak infinito.
―¡No con raquetas de tenis! ―protestan los caballeros Trapisondo de Torío y Florismartín de Ambroz.
SupprimerAl caballero que más nos concierne sabemos que le gusta la épica de San Nadal. Y el otro, sin ser santo, resta como Dios.
SupprimerMundo,no cambies por nada del García.
RépondreSupprimerPero es que aquí se parte de un error de base. La versión de Trapiello no es para expertos en literatura. No es para Rico, Martín de Riquer, etc. Es para lectores de a pie, para gente que aún no se atrevió a leerlo en V.O. del siglo XVII. Entonces ese señor no debería haber opinado de un libro que no era para él.
RépondreSupprimerEl error de base es aguar el vino bueno porque se piense apriorísticanete que el personal es incapaz de valorarlo en sus virtudes.
SupprimerLeyendo el "Q" de Trapiello algunos se van a conformar y no leerán el bueno. Mal servicio. Como no sea el editorial.
Todo el mundo anda retocando lo que ya se ha dicho, pero es fácil y cobarde lanzar andanadas con el Quijote de cañón, JL tiene un blog por el que cobra y es el vocero de quien pone la pasta, lo cual me parece poco honesto dado que se trata de un catedrático, hay mucha gente mal escribiendo como este aburre monas,
RépondreSupprimerSon opiniones de escuelitas puramente teóricas y estructurales, son egos con afán de pureza, se creen extremadamente sensibles y nada sensibleros, gente segura de sus principios, sectarios , intransigentes, y muy amigos de mantener su ideología. Se afanan en lo suyo y punto, siempre quieren ganar, y te obligan a responder para que no se regocijen pensando que te achicas, al final te obligan a ser combativo o se pasan de listo, la mejor defensa es un buen ataque, es así por desgracia
RépondreSupprimercon lo fácil que es entender el punto de vista de AT: traducir el Quijote al castellano actual con el mismo afán del que lo traduce al inglés actual, sin que sea criticado por ello... y aun con todo, cuánta envidia, cuánta mala leche, cuánto cortar un pelo en tres
RépondreSupprimerYo también estuve en esa presentación y de acuerdo con que nos divertimos. Pero a mi modo de ver la gracia la puso en un 120 por ciento AT.
RépondreSupprimerTampoco utilizaría ni mucho menos la metáfora del partido de tenis: no puede darse entre Rafa Nada y yo, por ejemplo.
Y a JLGM lo vi como una zarza, que sí puede tratar de enredar, aunque sea a RN. Nieves
Pero el partido entre AT y JLGM, tal como ellos confirmaron en el acto, empezó hace bastante tiempo y se intuye que aún durará muchos sets. En mi opinión, lanzándose bolas largas de esas que doblan la muñeca se divierten y se apoyan mutuamente. A JLGM no se le debe subestimar, las zarzas pinchan y son inteligentemente rebeldes. Es más, me sorprendió su cultura literaria cuando al autografiarme su diario asoció inmediatamente mi apellido al de un poeta comillano oriundo de Asturias, cuya importancia, en cambio, nunca fue demasiado valorada por mi familia.
SupprimerLea, por favor, mire qué buena columna. Seguro que se va a divertir:
RépondreSupprimerhttp://www.eldiario.es/cartaconpregunta/Mariano-Rajoy_6_450464981.html
Es un tanto necio salir al paso de su libro, este y otros " sabios " piensan que las épocas se suceden sin más, cuando sabemos que hay que engarzarlas .
RépondreSupprimerSi el Quijote no se lee habrá que reverdecerle, usted llegó y lo amachambró a nuestra época, amplió el abanico y ahí quedará, El Quijote tiene derecho a cohabitar con la modernidad, igual que Hamlet o Julio Cesar, ojalá vuelva al Mundo de los Sueños
El Quijote SÍ SE LEE, aunque aumentar el número de sus lectores no es nunca una mala cosa. Pero no hace ninguna falta ponerlo a "cohabitar con la modernidad", cosa que, según lo que por ello se entienda, o hace por sí solo o no hace de ninguna manera (ni lo necesita). Se trata únicamente de facilitar su lectura a quienes necesiten de esa facilidad.
SupprimerNo es lo mismo es cohabitar con la modernidad, que cohabitar en la modernidad, no doy más claves,
SupprimerGracias a todos los lectores, sois muy amables e inteligentes.
Leo comentarios, y veo que nadie se dio cuenta de la gravedad del caso -que no son las críticas al Quijote actualizado-.
RépondreSupprimerHay una muy grave traición por el medio, perpetrada con mucho conocimiento y mala fe por parte de "buen" (comillas de ironía) JLGM, que solicitó presencia de Trapiello para dar bombo a su libro, mientras en la otra mano llevaba días escondido un puñal.
Yo también entiendo (no olvido), que se pueda ser de todo en la vida, pero no un traidor miserable, y es bueno que se sepa y se conozca, quién y cómo es cada uno.
Cuando el "atacante" empieza por dejar sentado (lo hace en su blog) que es polemista, pendenciero, un poco bocazas, provocador impenitente y propenso a tensar hasta el límite sus relaciones amistosas, supongo que los subsiguientes enfados son algo fingidos, algo impostados y más bien auto-impuestos. Más aún si se sabe que el "enfant terrible" no escatima elogios allí donde, a su caprichoso criterio, un logro los requiere.
RépondreSupprimerMagnífico, Andrés. El tiempo, que es ese juez insondable que da y quita razones, pone a cada uno en su sitio. Espero ansioso Mundo es.
RépondreSupprimerA mi estos torneos me recuerdan los programas basura de televisión: hay que gritar para subir la audiencia. Eso si: en este caso, y como somos exqusitos, con educación y buen estilo. Puñaladas de seda. Y celebrarémoslo en Asturias con unas sidrinas
RépondreSupprimerPor cierto, ya he preguntado en Alberti, y su respuesta es que no hay grabación de aquella noche... lo cual no quiera decir que no exista.
RépondreSupprimerMe confirman desde la calle Tutor que hay grabación de audio, y que la van a colgar en Facebook.
Supprimer"Muy grave traición", "traidor miserable"... Amigo Miguel, tómate una tila (o más bien unas cuantas). Yo estuve en la Alberti, y conozco hace muchos años tanto a uno como a otro. Y semejantes disparates están fuera de lugar. Tanto, que me consta que el propio AT ha invitado después a JLGM a que sea él quien a su vez le presente en alguna ocasión futura. Ya digo, la tila es sanísima. Y tanto estrés, en cambio, muy malo.
RépondreSupprimerAnómino recomedador de tilas, tal vez si dieras la cara me pensaría bien tus intenciones y desvelos hacia mi salud, y no mal como hago ahora, por imaginar quién se esconde detrás.
Supprimer¡Ánimo y valor!
La imaginación es libre, amigo Miguel, y no seré yo quien le ponga trabas. También lo es es disparate, como lo prueba la intervención tuya a la que contestaba; a ése, eres tú quien debería ponérselas, pienso. Ah, por cierto: si tan seguro estás de quien soy, puedes poner aquí mi nombre, que no me voy a enfadar.
SupprimerLo dicho. ¿Cómo vamos de "share"?
RépondreSupprimerMiguel : al decir que nadie se da cuenta del caso, ya empiezas sobrevalorandote, aunque yo veo que pecas de inocente, si los demás hablamos del libro, es porqué respetamos la sabiduría de Jose Luis y no podemos dejar mal Hemeroflexia, Para atacar a Jose Luis o a un escritor con elegancia, hay que ser muy listo,saber mucho y preparar la respuesta, cuando escribes no puedes ser tajante, es mejor ser un poco ambiguo para dar a la gente la oportunidad de pensar.
RépondreSupprimerTe digo esto porque pareces un joven que quiere ser escritor, no veo en ti mala voluntad, eres valiente pero para escribir y gustar hay que ser un mago de la palabra, trabajar mucho y no desalentarse por las críticas, para llegar al nivel de algunos comentaristas de aquí, te faltan unas pocas miles de horas de trabajo, un escritor chulo es al que no le puede rebatir aunque te provoque,
Dentro de unos días veras como te arrepientes de como hablaste, si no tienes esa capacidad de reconocer lo mal que lo has hecho ,no vales para esto. Prueba decir cosas que los demás no digan y no te enfades, la gente tiene retranca, pero hay que ser incombustible, y no perder la afición.
No sabía que viniendo por este blog, me iban a salir gratis el médico general, y el psiquiatra. Tendré que tomarlo con más frecuencia, como las manzanas.
RépondreSupprimerAmigo anónimo de las tilas, pensé que habías comprendido en mi primer mensaje que me daba igual quién fueras. En este segundo, todo sigue igual.
Gino Severini, no has dado ni una sobre mí: ni escribo, ni quiero, ni soy joven, ni me voy a arrepentir de lo que dije dentro de unos días.
Por tanto, ha sido vano tu intento por analizarme, ubicarme y enmendarme, eso sí, desde tu magnánima modestia (no como yo).
Hablemos sobre libros y escritores, que para "sabios traidores", ya se llenan demasiadas páginas, cada día, en todos los diarios.
Lo de "imaginar quién se esconde detrás" refiriéndote a mi anonimato lo has dicho tú, no yo. Quizá es eso, que "no escribes", y por eso te expresas con cierta confusión.
RépondreSupprimerEn todo caso, precisamente eso hacemos: hablar sobre libros y escritores. Quien habla, y con considerables dosis de vinagre, sobre "traidores miserables", en tu propio exabrupto, eres justamente tú.
Y que tu falta, evidente, de ecuanimidad no tenga ni siquiera la disculpa de la juventud, tan fácilmente acalorada a veces, no me parece a mí motivo para sentirse orgulloso; más bien todo lo contrario.