EN Cisnes salvajes, el implacable relato de Chang-Jung sobre su familia en los años de la Revolución Cultural, se relata la historia de Chang-Shou-yu. Disgustado este con la política del emperador, decide retirarse discretamente de la corte. Empieza entonces a vérsele con una caña a la orilla del río, sentado y abstraído horas y horas. Extrañados todos de la actitud de quien fuera en otro tiempo un cortesano activo e influyente, le preguntan cómo es que había cobrado tanta afición por la pesca, a lo que Chang-Shou-yu les responde: “Si vengo a pescar no es por la pesca”. Esta respuesta acabó de perderle, pues todos entendieron al fin sus críticas al emperador.
¿Es real o sólo una percepción subjetiva? ¿El número de quienes, como ese funcionario chino, se apartan de todo, es cada vez mayor? Vuelve a hablarse de desánimo y pesimismo, y “el fantasma del 98” recorre España. Sentencias judiciales demenciadas y los consecuentes “veredictos sociales” en varios asuntos penales, académicos y políticos, han sumido a muchos en la pesadumbre y el desánimo. Algunos, que no se atreverían a decir lo mismo de su región andaluza, madrileña o catalana, afirman sin ambages y se diría que con perverso regusto: “La miseria de España”, “país de cabreros”, “África en ciernes”. Entretanto se disipe este (re)sentimiento, he abierto la libreta donde hace años dibujé un puñado de florecillas del campo, con sus correspondientes nombres. Me los dictó el amigo del que se habló aquí hace unas semanas. Buscaba ahora una flor recién descubierta. Pero no figura entre aquellas y no podré preguntar a mi amigo, pues acaba de morir con su secreto.
Siempre he sentido una predilección especial por esas flores humildes, a veces bellísimas, que en mayo salen por todas partes, incluso en una estrecha llaga del asfalto. Sé también que algunos se refieren a ellas como sinónimo de ingenuidad y simpleza. Ingenuo y simple, me he sentado en la pradera. Pero de pronto me acuerdo de Galdós, y su memorable artículo “Soñemos, alma, soñemos”. Lo escribió en 1903, cuando ya era viejo y empezaba, al igual que Chang-Shou-yu, a perder el favor del público. Advertía en él de los peligros del derrotismo, y ese recuerdo hizo que me fijara más en esa florecilla de nada. Créanlo o no: le estaba diciendo a otra, mucho más pequeña, “soñemos, hermana, soñemos”.
[Publicado en el Magazine de La Vanguardia el 26 de mayor de 2018]
Una bella pincelada de esperanza.
RépondreSupprimerSaludos
Sol Palacín
En estas sociedades avanzadas seguimos luchando contra la miseria, la violencia, el terror, la mentira, el materialismo y la injusticia. Es el hombre el animal más extraño, como decía el Estagirita, también conocido por Aristóteles, pero también la hierba más débil. El hombre resiste porque sueña y espera y porque, a veces, los buenos sentimientos hacen olvidar su limitada y torcida condición. “La imaginación al poder” era la divisa revolucionaria del 68. Se echa en falta la imaginación, la honradez y la unión en el poder político, pero también en todas las capas de esta sociedad embrutecida por el dinero, la competitividad y el olvido de los valores humanos esenciales. En estas coordenadas tan negativas para el ser humano, los únicos galardones de éste serán la tristeza y la desesperación, la prolongación de la vida física lastrada por la enfermedad del espíritu. No obstante, hay que mirar nuestro mundo con esperanza. La tristeza traiciona la condición humana. Dante encontró a los tristes en el infierno: «Tristes fuimos en el dulce aire que del sol se alegra...».
RépondreSupprimerJosé Fuentes Miranda.
Con permiso. No sé si viene a cuento esta cita. Es de Baroja, está en el extraño prólogo de su novela "César o nada", y a mí me parece oportuna para estos tiempos tan colectivistas y rebañiegos y tan enemigos de lo individual:"Una democracia refinada sería la que, prescindiendo de los azares del nacimiento, igualars en lo posible los medios de ganar, de aprender y hasta de vivir, y dejara en libertad las inteligencias, las voluntades y las conciencias, para que se destacaran unas sobre otras. La democracia moderna, por el contrario tiende a aplanar los espíritus e impedir el predominio de las capacidades, esfumándolo todo en un ambiente de vulgaridad. En cambio, ayuda a destacarse unos intereses sobre otros". Gracias.
RépondreSupprimerJ.Ángel Gómez
“Vuelve la paz al cielo;
RépondreSupprimerla brisa tutelar esparce aromas
otra vez sobre el campo, y aparece
en la bendita soledad tu sombra.” (A.M.)
Oh florecilla franciscana de siempre,
oh milagro de la revolución industrial,
que surges indómita en la grieta de asfalto,
en los eternos valles urbanos del Rift,
en la costra de ‘Polis’ que ya cubre el Mundo.
Qué bellas palabras, como siempre, un rayo de esperanza poética .Gracias, Sr. Trapiello.
RépondreSupprimerEsta puede ser la liquidacion definitiva de España. Llega el gobierno del sectarismo y el separatismo. Las coletas aposentadas en viviendas de obreros, a 600.000 euros.
RépondreSupprimerHombre, yo soy un poco más optimista. Si el gobierno de un partido que ha visto cómo los jueces detallaban en su sentencia que conocía (y ocultó) las prácticas de corrupción de sus miembros, cómo descalificaban por poco fiable el testimonio del propio presidente del gobierno (y del partido), que tiene todavía pendientes una TREINTENA de juicios por corrupción (en uno de los cuales se convertirá en el PRIMER PARTIDO en sentarse como tal en el banquillo de los acusados... Si ese gobierno no ha acabado con España, es que la cosa no debe ser fácil.
SupprimerSeguimos esperando la sentencia de los ERE.Repito que la liquidacion de España puede estar proxima.
RépondreSupprimerI’m Nobody! Who are you?
RépondreSupprimerAre you – Nobody – too?
Then there’s a pair of us!
Don’t tell! they’d advertise – you know!
How dreary – to be – Somebody!
How public – like a Frog –
To tell one’s name – the livelong June –
To an admiring Bog!
E.D.
Al señor Fuentes Miranda parece ser que solo le interesa una parte de España y según que españoles, y que no tiene por costumbre responder aquello que le incomoda. Con españoles como usted, prefiero a los independentistas catalanes. Como los conozco, y no se me moleste, puede decir que son mas honestos que usted y muchos de sus españoles, especialmente los que han gobernado este país de los demonios hasta ayer.
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RépondreSupprimerOtra irresponsable moción de censura en una democracia, la española, que, aunque tenga cuarenta años de existencia, parece ya caduca, cuando ni siquiera ha llegado a su total maduración. El panorama político actual está dominado por tres figuras. El hombre impasible, quizás ya suficientemente amortizado, que consiguió superar una gravísima crisis económica, aunque finalmente lo que se ha estabilizado es la macroeconomía; el ambicioso, que con tal de llegar a La Moncloa, está dispuesto a hacer añicos un sistema político y una historia de más de cinco siglos; y el joven pretendiente, que siempre parece estar al sol que más calienta y que ha aprendido muy bien a nadar y guardar la ropa. No obstante, causa mucha indignación ver a los tres líderes tirándose a degüello, en porfías dialécticas, en debates sin mucho sentido que sólo sirven para alimentar la demagogia milagrera que, incluso desde los chalés de lujo, acecha a todos. Ahora, más que nunca, sería imprescindible un gran pacto entre los tres partidos respetuosos con la Constitución, tendente a conseguir objetivos muy definidos y perentorios: Poner coto a la corrupción política y social; la consolidación económica, sin ahondar cada día más en las diferencias sociales que acercan a muchos ciudadanos a los umbrales de la pobreza; dejar definitivamente cerrado el marco constitucional, alejando para siempre los fantasmas del separatismo y dejando asentados para siempre los principios y los sentimientos de ese sueño y realidad de siglos que se llama España. Con ese gran acuerdo o pacto, alejaríamos a los vendedores de crecepelos milagrosos y coletas furibundas y sectarias, que amenazan con igualar a todos los españoles en la pobreza y convertir a España en la Venezuela de Europa.
José Fuentes Miranda.
Lo preocupante es que usted se queda muy a gusto con su ladrillo de nata y fresa. Lo inaceptable es que se obdtineben seguir castigandonos porque utiliza este espacio como terapia personal gratuita. Sepa usted comportarse, hombre de Dios.
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RépondreSupprimerEs la última vez que escribo en este blog de mi admirado Andrés Trapiello. Hay muchos que sólo ven bonito su propio ombligo y no respetan las opiniones, ideas y sentimientos de los demás, cayendo incluso en la grosería. Me limitaré a leer los libros de Trapiello.
Yo creo que lo grosero es monopolizar el espacio común. Gracias por su dimisión, aunque volverá usted con impulso renovado, es lo habitual.
SupprimerNo es posible que vea sus propios defectos en los demás? Piense un momento que usted señor Fuentes Miranda ha coartado el que otros nos expresemos en donde estos otros no coartamos a nadie, ni tan siquiera a usted. Está bien que lea los libros de Andres Trapiello, como yo lo hago, pero lea también otros, le vendrá bien a su sentido de la democracia. Un saludo.
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