ALMANAQUE DE ANDRÉS TRAPIELLO
En los libros!
Felicidades!!!Que cumpla muchísimos más y que nos siga haciendo felices con sus libros.María
Escudriñad la lengua, porque la lengua lleva, a presión de atmósferas seculares, el sedimento de los siglos, el más rico aluvión del espíritu colectivo; escudriñad la lengua.
Y Heidegger le obedeció, pero lleno de vanidosas sutilezas esencialistas, se desorientó y se perdió. “No era eso, no era eso...”
En los libros!
RépondreSupprimerFelicidades!!!
SupprimerQue cumpla muchísimos más y que nos siga haciendo felices con sus libros.
María
Escudriñad la lengua, porque la lengua lleva, a presión de atmósferas seculares, el sedimento de los siglos, el más rico aluvión del espíritu colectivo; escudriñad la lengua.
RépondreSupprimerY Heidegger le obedeció, pero lleno de vanidosas sutilezas esencialistas, se desorientó y se perdió. “No era eso, no era eso...”
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