14 septembre 2014

Decíamos ayer

DECÍAMOS ayer que acaso cuánto mejor, en estas fechas, irse a nadar a la piscina, tal como escribió Kafka en su diario precisamente la mañana en que Alemania declaraba la guerra al mundo.
También parecerán dentro de unos años estos días que vivimos con incertidumbre y una vaga angustia, lejanísimos. Y sin la menor duda, algunos los podrán ver con indiferencia y sin dolor, libres de veras. Felices ellos. La luna les acompañará entonces, como nos acompaña, y su felicidad nos ayuda a pasar mejor estas jornadas, y la vergüenza.
Volvamos, pues, a la lengua de pájaros, rosas y lunas, la que ellos seguirán hablando, más allá de la Historia; volvamos, sí, a su misterio arcano, tan actual, tan vivo, tan presente.


3 de septiembre de 2014

6 commentaires:

  1. Volvamos a poner el cerebro en sus revoluciones habituales porque el espasmo catalán se lo medicarán ellos mismos antes del colapso que solo desean como una amenaza permanente. No en vano la murga forma parte de nuestra música irrenunciable y convive con la rumba catalana a las mil maravillas.

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  2. Sosegaos, mi señor Trapiello; si tal anticipáis la calma venidera no os dejéis avasallar por males de coyuntura. Mas no perdáis de vista que vuestra desazón presente convive con la ilusión (ilusión digo) de otros que para poder gozar de la lengua del colibrí y de la luna han de seguir la trocha, porque un imperativo hondo, enardecido, quizá insensato, les impulsa y les zarandea, como cuando Eneas surcaba el estrecho de Mesina y Poseidón dejaba que jugase la "nena" con la nave de los aguerridos troyanos en desbandada. Son designios de los dioses y contra ellos nada pueden los míseros mortales: vivimos aherrojados por los mitos y ellos nos ciegan y nos llevan derechos a la escollera.
    Y si lo que os desasosiega no es el desplante de los que se quieren ir de la casa común (ni la Biblia negó el derecho de los hijos pródigos a abandonar la casa paterna), sino el estado ruinoso de la Patria..., no os refugiéis en pajareras, ni en jardines, ni en observatorios astronómicos: denunciad con denuedo a toda laya de ladrones y de prevaricadores (con nombres y apellidos a poder ser); poned en la picota a los falsarios y a los que escarnecen el buen criterio de los españoles mintiéndoles y pretendiendo embaucarlos con mentiras alevosas. Solo así será conforme al buen criterio que lamentéis lo accesorio después de haberos empleado a fondo en lo sustantivo.
    Pues, mi señor Andrés Trapiello, el mal primordial que nos aqueja no es otro que haber llegado -por ignorancia de los unos, por la abulia de los más, por egoísmo de unos pocos- a este pantano de inmundicia en el que chapoteamos todos (algunos con harta satisfacción) desde mucho, muchísimo tiempo.
    Que un hijo pródigo (o dos) se quieran ir de casa bien poca cosa iba a ser, si esta restara limpia, ordenada, apacible y con el aire renovado.
    Y nunca está de más que nos cuidemos de las amistades que hacemos, que pueden influirnos de modo pernicioso.
    Quede con Dios vuesa merced.

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  3. Siempre he compartido ese único lenguaje arcano y universal que tan bien sabe usted expresar con su prosa inconfundiblemente suya. Le admiro por ello, y la disfruto siguiendo sus diarios perdidos.

    Hace pocos días, murió Montserrat Abelló, poetisa catalana empordanesa. Le transcribo y traduzco unos pocos versos, quizá con la intención de seguir construyendo puentes - arcanos y lejanos como el tiempo, y como tales, tal vez cercanos - a pesar de los pesares.

    Sol, sola, soledat

    Sol, sola, soledat.
    Solitud

    On trobar aquells
    i aquelles

    que volien
    fer-me companyia ?

    Solo, sola, soledad

    Solo, sola, soledad.
    Soledad.

    Donde encontrar aquellos
    y aquellas

    que querían
    hacerme compañía ?

    M.Abelló ( 1918-2014)

    Por aqui a menudo la suelo encontrar, a pesar de que tengamos distintas opiniones. En la poesia, también.

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  4. Esa es la gran tentación, irse a nadar y que se hunda el mundo. Es tan grande la impotencia que, tratar de cambiar las cosas es apenas un intento de salvaguardar nuestra dignidad.

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  5. Sutiles colibríes son ahora los dinosaurios, no todo va siempre a peor.

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  6. ―Yo no la limpio, solo le hago la foto: me lo he ganado.

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